Principios / Marta Yolanda Díaz-Durán A.

3.11.2013

Hugo "Honey Boo Boo" Chávez




Tanto la adoración por el fallecido dictador venezolano como por la niña Alana Thompson, son un reflejo de lo expuesto en “Pensar rápido, pensar despacio”, del ganador del Premio Nobel en Economía 2002, Daniel Kahneman: “…el cambio frecuente de tareas y el trabajo mental apresurado no son intrínsecamente placenteros, y las personas los evitan en lo posible. Esto es lo que hace que la ley del mínimo esfuerzo sea una verdadera ley…mantener una línea coherente de pensamiento requiere disciplina”.

Por eso, es fácil manipular a la mayoría. Como bien escribió Juvenal en la “Sátira X” (77–81): “…Hace ya mucho tiempo, de cuando no vendíamos nuestro voto a ningún hombre, hemos abandonado nuestros deberes; la gente que alguna vez llevó a cabo comando militar, alta oficina civil, legiones - todo, ahora se limita a sí misma y ansiosamente espera por sólo dos cosas: pan y circo”. La diferencia es que a "Honey Boo Boo” la pueden dejar de ver los televidentes cuando quieran y no causa ningún daño aparente a quienes optan por no verla. Mientras que en el caso de Hugo Chávez, salieron afectados casi por igual la mayoría que lo mantuvo en el poder, como aquellos que lo combatieron.

El hombre masa, lamentablemente, es intelectualmente perezoso: le molesta cuestionarse, buscar las premisas sobre las cuales emite juicios y verificar en la realidad la veracidad de las mismas. Odia reconocer que se equivoca. Prefiere que otros le digan qué pensar, más aún si ese pensamiento incluye culpar a los demás de sus desgracias. Son irresponsables, no aceptan las consecuencias de sus acciones como lo que son: el resultado de sus decisiones.

Lo anterior es aplicable a cualquiera, sin importar su origen o grupo social con el que se identifique. En “La rebelión de las masas”, José Ortega y Gasset explicó en el pie de página número 42: “Abandonada a su propia inclinación, la masa, sea la que sea, plebeya o aristocrática, tiende siempre, por afán de vivir, a destruir las causas de su vida”. Con pequeñas diferencias, la retórica populista es utilizada por oportunistas tanto de izquierda como de derecha: ambos conceptos intelectualmente vacíos. Ambos proponen el estatismo y el intervencionismo. Ambos pensamientos se apoyan en el mercantilismo para mantenerse en el ejercicio del poder y enriquecer a sus dirigentes, familiares y amigos. Ambos terminan destruyendo al creador de riqueza: matan a la gallina de los huevos de oro.

“…porque el que parte nunca reparte parte del pastel / si la cosa va mal a callar / porque el que parte nunca reparte parte del pastel / que los padres de la patria nos darán / más circo y más pan”, recita el estribillo de la canción del dúo español “Amistades Peligrosas”, titulada: “Más circo y más pan”. Y, mientras muchos en la prensa están a las órdenes de los poderosos y lo políticamente correcto, aquellos que no nos dejamos engañar, tampoco nos vamos a callar. Vamos a denunciar el engaño del circo y del pan.


Artículo publicado en el diario guatemalteco “Siglo Veintiuno”, el lunes 11 de marzo de 2013.

Etiquetas: , , , , , , , , , ,

1 Comments:

  • Buen post uno de los defectos de la democracia es precisamente eso que las masas tienden ha actuar diferente de como lo haria el individuo en forma separada y hay algo más esa forma en que se manejan las masas es algo que no cambiara jamás a todos nos ha pasado alguna vez en la vida que nos movemos por lo que dice el conglomerado y no nuestra razón por ejemplo leemos en internet que 10 personas se intoxicaron comiendo manzanas verdes y dejamos de comprar manzanas verdes durante un buen tiempo sin importarnos que podemos hacer quebrar a un productos de manazanas...
    Como eso no cambiara, siempre existiran personas que se quieran aprovecharse de esto y nunca se podra evitar es algo que ha pasado durante toda la historia de la humanidad, a veces en personas como Chávez y otras en formas extremistas como Hitler, lo que nos queda es saber escuchar al conglomerado y saber cuales son las exigencias de la masas para responder en ocasiones a esas exigencias y no permitir que caigan en manos de charlatanes que les endulza los oidos.
    Creo también que es parte del ciclo que tiene que vivir la humanidad el ser humano necesita vivir la experiencia de haber llevado al poder a alguien como Hitler para darse cuenta de ciertas cosas que de otro modo no se hubieran percatado, suena terrible pero es la triste realidad...solo los venezolanos sabran si el gobierno de Chávez fue bueno para ellos o no, a los que tenemos un pensamiento liberal no nos gusta que la mayoría escogan payasos como Chávez o Baldizón pero nos olvidamos que ellos llegan al poder si el resto de líderes no son lo sufientemente capaces de mover a las masas y demostrarles que haciendo las cosas de buena forma igual los pobres pueden mejorar su calidad de vida.
    Por lo tanto es tarea de nosotros y nuestros lideres mover masas igual que hacen esos pseudolideres porque las votaciones no se adquieren de otra forma tristemente.

    By Blogger Carlos Escalante, at 2:03 p.m.  

Publicar un comentario

<< Home